viernes, 30 de marzo de 2007

TANGER - ASSILAH, 48 km



Tanger me recuerda mucho a Cuba: su aire colonial y casas semi derruidas al lado de otras en construcción.
Despues hombres, hombres y más hombres. De dos en dos, de tres en tres, solos, con chilaba, con babuchas, de la mano, corriendo, andando, siempre en movimiento, el olor a combustible mal quemado, los adelantamientos imposibles, el parque móvil del pasado conviviendo con el reciente fruto de la nueva sociedad del bienestar proporcionada por los emigrantes.
Después autopista, para nosotros solos, rebaños de corderos paciendo tranquilamente, vacas "trepadoras", pollinos, los primeros camellos, y verde, mucho verde, y agua, mucha agua. En la villa marinera de Assilah nos obsequian con unas aceitunas y dos alcachofas hervidas deliciosas, a la espera de las gambas y la dorada a la plancha con ajo y perejil que hemos pedido.
El deporte nacional es el fútbol y todos los jovenes lo practican en la playa. El babucha-gol: Fútbol con babuchas.
El horario es dos horas menos que en Espana y este horrible teclado francés con todas las teclas cambiadas.

1 comentario:

costa sin mar dijo...

buena descripción de tánger,

saludos desde esta orilla, man